Irlanda vs. los Pumas, un antiguo clásico que reverdece a partir de Felipe Contepomi y el ascenso argentino
La tentación de llamar “clásico” al enfrentamiento entre los Pumas e Irlanda es seductora, aunque extratemporal. Lejos quedaron aquellas épocas en las que jugaban al límite del reglamento, en que se cargaban durante los partidos, se acusaban de “asquerosos” ante la prensa y había que frenarlos en los terceros tiempos para que la cosa no se desmadrara. Lejos quedó la época, también, en la que Irlanda era un oponente a la medida de los argentinos, potenciado por cuatro cruces en cinco mundiales consecutivos. Aunque sin los matices procaces de antaño, la antigua rivalidad reverdece a partir de la presencia de Felipe Contepomi en el cuerpo técnico celeste y blanco, amén del buen pasar de su seleccionado y de la posibilidad de hacer historia.